martes, 26 de julio de 2016

░▒▓▓▒░ ░▒▓ "En la oscuridad que me rodea" ░▒▓▓▒░ ░▒▓

En la oscuridad que me rodea, me incorporo angustiada…le impongo a mis ojos, la ardua labor de vislumbrar el camino…

Pero cualquier esfuerzo es infructuoso, pues todo es penumbra en torno a mí; pues hace mucho perdí la senda y la luz que me orientaba; y aunque por todos los medios intente volver a la vida, imposible ha sido.

En medio de la penumbra y sin dirección avanzo…pues algo en mi interior, no me permite desistir. Quizás se deba al terror que me embarga, a quedar atrapada en este gélido abismo de desolación.

Caminar sin rumbo, como una autómata no tiene sentido; pues al final de mi jornada nadie por mi espera…más no me es permitido desistir.

Desmoralizada y decepcionada, continúo en medio de las tinieblas. Tropiezo una y otra vez… ¡Estoy pulverizada!

En el pasto accedo a reposar, y observando al cielo he buscado esa estrella; que con su luminiscencia me oriente…Pero ella tampoco está conmigo; pues como todos me ha abandonado.

Mi corazón ha sido herido de muerte...y sin que nada logre descubrir; la tristeza y desamparo, de mi alma contrita ineludiblemente se apoderan. No obstante ellas también; hechas añicos están.

Mis ojos siento pesados…y por Morfeo me consiento seducir; anhelando que este sueño sea eterno, para así fulminar el dolor, que implacable me deja sin aliento.

La dulce voz de un ángel me despierta…más mi cuerpo se revela; es entonces cuando inmóvil, percibo la tibieza de un beso; provenientes de unos labios, que al igual que los míos...descubro marchitos.

Súbitamente la angelical presencia, en sus fuertes brazos me abriga; me invita a reposar en su pecho... enciende en mí, una pequeña flama de esperanza; símbolo de la candidez que tan afanosamente he buscado.

Temerosa pero ansiosa, elevo la mirada…y es entonces, cuando por vez primera; su dulce rostro contemplo.

Quizás es solo una quimera, sin embargo no tengo nada que perder; así pues con desespero a su existencia me aferro, porque sé...¡Es un enviado del cielo!

Susurrando sutilmente, más seguro de él, me ha preguntado; si avanzar hacia el otoño de nuestras vidas... junto a él, yo quiero.

Y es desde ese instante en que llegó a mí; que no he hecho otra cosa…que amarle, honrarle y venerarle.


Silvia Regina Cossío Cámara 
*Autor* 
Andrés Alfredo Orellana Pineda 
Sir Galahanth 
*Derechos Reservados*

jueves, 14 de julio de 2016

Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ "Amigos para siempre"


Desde que te conocí, me percaté de que eras un hombre muy especial; atento, dulce, inocente y diferente. Te llegué a admirar, ganaste toda mi confianza…pero sobretodo te aprendí a amar de forma singular.

Durante años, y día con día; compartimos horas y horas... Fuimos cómplices en la vida…tú escribiendo y yo correspondiendo a tus letras; las cuales siempre me expresabas eran provenientes solamente de tu imaginación. No obstante, esta forma de proceder; sería causa de incesantes injurias, y ataques en contra de mi persona.

Pues con el transcurrir del tiempo, se sucedieron “importantes eventos”; los cuales se salieron de todo control. Situación que al final me llevó a claudicar…concluyendo así, con toda posibilidad; de que pudiésemos continuar con nuestra jornada en armonía.

Sin embargo, la distancia e incluso la ausencia, <en mi caso>…no han sido, sinónimo de falta de amor y/o consideración…Simplemente, hay circunstancias en la vida, que nos coloca frente a una encrucijada; forzándonos a escoger la senda a seguir…Y la mía lamentablemente debía ser, en dirección opuesta a la tuya.

En mi defensa, solamente diré que enfrentarme al escrutinio de quienes poco o nada me conocen, fue sumamente engorroso y doloroso; y aunque me considero una mujer, que no fácilmente se deja doblegar…con el paso del tiempo; se fue volviendo ardua labor, exteriorizar mis sentimientos….pues todo cuanto expresaba, hiciera o dejara de hacer…era utilizado en mi contra; y al final, termine por colapsar de forma literal.

Siempre, siempre; a lo largo de mi existencia, he vivido a mi manera…más imposible ha sido, no reflexionar en el refrán que reza: “La mentira dura, hasta que la verdad florece”… Pero lamentablemente, más certero es: “La mentira dura y dura, hasta donde nadie se figura y muchas veces hasta la sepultura” Por lo tanto...la razón debía de imperar sobre el corazón.

Así pues, decidí que lo más prudente, era retirarme...Dicho aislamiento sería pasajero; pues me alejaría solamente, por largos treinta días…..sin nunca imaginar que; estos se tornarían en meses, y por último en años; ya que a pesar de mi ausencia...las denigrantes calumnias, nunca cesaron. Más en este período de separación; debes saber que te he extrañado en demasía, y te tuve presente perennemente.

Asimismo, debes saber que invariablemente; imposible fue no sentirte al ciento por ciento a mi lado; puesto que, durante mi “auto destierro”, seguí cada una de tus publicaciones. Al inicio Andrés me las compartía…y con el tiempo, volví a esta amada comunidad, para con infinita ilusión...tomar tus letras; y preparar los presentes que hoy te entrego.

He de confesar que algunos de tus poemas, me llenaban de alegría; ya que eran dulces y tiernos…otras un tanto atrevidos, y algunos pocos más, de condena y poco aprecio; escritos que sin duda alguna, fueron motivo de dolor y/o causa de conflictos con Andrés.

Así pues, cuando esto acontecía…sentí el deseo de marchar para siempre; sin volver la vista atrás…Pero al final, la balanza siempre se inclinó, en favor del sentimiento que nos unió; siendo la razón por la cual, ha sido el deseo de mi corazón pronunciarme en este espacio.

¡Sí! Heme aquí de nuevo, porque soy de las personas, que no cargará con lamentación alguna a la tumba; por no haber expresado en su momento...un te amo, o reconocer lo invaluable que ha sido el amor, y consideración; que desinteresadamente me han ofrendado.

Por lo antes expuesto, mi amado Enrique Nieto Rubio; deseo externar que, el casto sentir que albergas en tu corazón por mí persona…ha sido totalmente recíproco. Permaneciste fiel a mi recuerdo, y asimismo…o quizás más….con la misma devoción, tú te mantuviste presente en mi vida. Pues en la distancia y aún en “total ausencia”; estuve a tu lado infinitas horas...día con día, y muchas veces hasta el amanecer, deleitandome y trabajando en tus blogs.

Si amiguito bello; ante la imposibilidad de compartir por las mañanas, tal cual hacíamos en antaño; y con el objeto de seguir honrando tus letras; edifiqué dos páginas…construidas a partir de un espacio en blanco, teniendo así mucho que aplicarme y trabajar...con el único propósito e ilusión, que tus escritos trascendieran a través de los tiempos; y así tus hijos, nietos y todos aquellos quienes te aman; siempre puedan encontrarte.

Para concluir…cumpliendo con el refrán que reza: “Al César, lo que es del César”….Debes saber que en su inicio, este trabajo con el cual pretendo rendirte un pequeño tributo; fue una empresa apoyada por Andrés. Puesto que, aún a pesar de los desacuerdos de ayer, y para mi dolor…los de hoy en día….él siempre te ha apreciado de forma sin igual…

Sentimiento que sé, es recíproco de tu parte; pues indefectiblemente, siempre fuimos como los tres mosqueteros…con nuestro juramento: "Unus pro omnibus, omnes pro uno" <”Uno para todos, y todos para uno”> Promesa de fidelidad a la amistad, que siempre nos unió; y de la cual tengo la certeza que ¡Por siempre persistirá!

Convicción proveniente, del hecho que en el pasado, sin importar que tan fuertes fueran los vientos; al final el amor que reinaba en nuestros corazones, eternamente prevaleció…convirtiéndonos así, en... ¡Amigos para siempre!

En fin mi amado amigo Enrique, la intención de este escrito, tiene como principal objetivo; agradecerte públicamente y con toda mi alma, las muestras de afecto vertidas hacia mi persona; pues sé que tu actuar...fue causa de escarnio por igual...hacia tu persona.

A continuación, me permito insertar los links; que te conducirán a los dos blogs; que para ti...con amor edifiqué. Uno de ellos, es el principal, y el otro construido como copia de seguridad.




¡Con todo mi amor!

Silvia Regina Cossío Cámara
*Derechos Reservados*